Cruceros desde Haifa

Una de las vistas más fotografiadas y visitadas que domina el Monte Carmelo y que da color a la ciudad gracias a la gran diversidad de plantas y flores del jardín que hacen juego con la Cúpula Dorada. Los jardines fueron levantados en 1953 y se pueden ver desde cualquier punto de Haifa y actualmente brillan aún más gracias a una magnífica renovación. En sus 200.000m2 de jardines se extienden 19 terrazas con 999 escaleras que miran al mar. Los emblemáticos jardines fueron reconocidos como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco en 2008 por su valor universal excepcional y “dedicado” a los seguidores de la fe Baha’i. A pasar de ser el centro del bahaísmo, pueden ser visitados por personas cualquier religión. Su belleza, tranquilidad y sosiego hace que la visita se grabe en la retina por mucho tiempo.

Para los católicos este Monasterio de Stella Maris es el más centro religioso de la ciudad. También conocido como el Monasterio de Nuestra Señora del Monte Carmelo fue fundado en 1892 por monjas que se desplazaron de Francia para representar a la Madre Teresa. Por esta razón las religiosas que viven aquí desde el siglo XIX se las llama Carmelitas. La visita a este Monasterio puede comenzar con las increíbles vistas hacia la bahía de Haifa y posteriormente al Monasterio para quedarse con la belleza artística interior como es la cúpula, el altar que está integrado en una cueva o el monumento a los soldados caídos de Napoleón.

El teleférico transparente es una de las atracciones turísticas más modernas que puedes encontrar en Haifa. Hace el recorrido por todo el barrio de Bat Galim hacia arriba, hasta el Monte Carmelo. Las vistas son realmente espectaculares ya que se ve la ciudad, el mar y la montaña y una vez finalizado el recorrido se puede hacer el descenso por un sendero que te acerca a la Cueva de Elías, aunque también puedes bajar en el mismo teleférico.

Jerusalén es la ciudad de peregrinación mundial más conocida por todos y sus más de 3000 años de historia así lo confieren. Mezcla de culturas y religiones conviven desde hace miles de años y la convierten en una ciudad llena de vida y que vibra en cada una de sus calles. La visita de Jerusalén destaca por los lugares que más reconocimiento religioso tiene como el Santo Sepulcro, la Iglesia de la Natividad con sus increíbles mosaicos, el Muro de las Lamentaciones - construido en el año 70 para los judíos y donde los rezos se profesan en la pared de 60m -, las estaciones de la Vía Dolorosa, el Monte de los Olivos y su capilla de 1924, o Getsemaní. Su gastronomía es sabrosa y exalta los 5 sentidos por su sabor, su olor, sus texturas y el sonido de los establecimientos que invitan a degustar todos sus platos.

Nazaret es conocida mundialmente por ser la ciudad donde vivió y creció Jesús, y hacia donde muchos religiosos peregrinan para vivir de cerca la experiencia del contraste de la ciudad de Jesús y el cambio que ha tenido a lo largo de los más de 3000 años de historia. Aunque históricamente es cristiana, la mayoría de sus habitantes son musulmanes. Paseando por la ciudad hay que descubrir rincones únicos como la Basílica de la Anunciación – la más grande del mundo de origen católico en Oriente Medio -, la Iglesia Sinagoga o el Pozo de María - donde los creyentes inmortalizan la imagen de la Virgen María siendo anunciada por el ángel Gabriel que daría luz a Jesús-. Si quieres conocer más referencias históricas religiosas, Nazaret es la ciudad a la que estás esperando acudir. Al final, déjate seducir por su gastronomía probando el pan de pita con el Hummus, el Shawarma, los faláfels o el labneh.